Al menos nueve cadáveres fueron hallados el martes en cuatro fosas clandestinas en Guerrero, un estado del sur de México azotado por la violencia del crimen organizado, informó la fiscalía estatal.

"Hasta ahora tenemos nueve cuerpos hallados, creemos que podrían encontrarse más por las denuncias que han hecho habitantes del lugar", dijo a la AFP un funcionario de la fiscalía.

Los cuerpos se encontraron en avanzado estado de descomposición en el municipio de Iguala de la Independencia, cerca de un lugar donde hace poco más de un mes fueron localizados otros nueve cadáveres, entre los que había tres mujeres.

El funcionario señaló que las autoridades mantienen la búsqueda porque "creemos que podrían encontrarse más por las denuncias que han hecho habitantes del lugar".

Unos vecinos informaron de que había olores fétidos en el lugar en donde se encontraron las fosas.

Unos miembros de un grupo delictivo autodenominado Guerreros Unidos son los responsables de la violencia registrada desde el año pasado en esa región.

El lunes, se registró en Guerrero el asesinato de un jefe regional de policía en una emboscada y, el domingo, un ataque armado contra el vehículo en el que viajaba una presidenta municipal dejó herido a uno de sus guardaespaladas.

Guerrero, uno de los estados más pobres y con un alto índice de violencia en el país, mantiene una fuerte presencia de integrantes del crimen organizado, mientras que grupos de autodefensa se han levantado en 47 de los 81 municipios que tiene la entidad.

Esta región, donde hay una fuerte producción de amapola y marihuana, es escenario frecuente de asesinatos y secuestros en el contexto de la lucha militarizada contra el narcotráfico, que junto con las pugnas entre los cárteles de droga han dejado en México más de 80.000 muertos desde diciembre de 2006.