Un agente de la Guardia Civil de 47 años falleció este lunes por la tarde y otros dos compañeros resultaron heridos tras ser arrollados por un una furgoneta durante un control de seguridad en la Autovía AS-I, que une Gijón con Mieres.

El control, que se realizaba para controlar el cierre perimetral a consecuencia de las restricciones por la Covid, estaba situado en el kilómetro 3, 400 de la Autovía AS-I, en el concejo de Mieres.

Según la Guardia Civil, el siniestro se produjo a las 18.25 horas cuando un conductor en una furgoneta puso descuidarse al volate, según las primeras investigaciones, y atropelló a los tres agentes, falleciendo Antonio Ambrosio, de 47 años, que llevaba en el cuerpo desde 1992, e hiriendo a los otros dos agentes.

Tras los hechos, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el Ministerio del Interior y la Guardia Civil han trasladado su pésame, al que se ha sumado el jefe del Ejecutivo en Asturias, Adrián Barbón, y varias asociaciones de la Guardia Civil.