Tegucigalpa.- Los simpatizantes al ex presidente Manuel Zelaya, son los responsables directos de los hechos que se están dando en Honduras.

Llaman represión al acto de defensa al cual todo gobierno en el mundo tiene derecho, siendo este, parte de las atribuciones del mandato presidencial.

Canales de televisión supuestamente de carácter noticioso, maliciosamente están desinformando a la comunidad “extranjera” que tiene injerencia en los asuntos puramente hondureños, con el fin de causar rechazo hacía esta nación.

Los periodistas que hacen esto ya se conocen, este es su modus vivendi y modus operandi, pagados directamente por la izquierda hondureña, financiados por el ex presidente Zelaya con el dinero proveniente del robo a nuestras arcas nacionales.

Hay que recordar que el ex presidente dejó en la ruina al país, el enorme robo que descaradamente hizo, equivalió a toda la riqueza que Honduras tenía hasta con las reservas internacionales.

En este “saco” se han ido los fondos de reducción a la pobreza, provenientes de condonaciones a la deuda externa conseguida por el Cardenal Oscar Andrés Rodríguez.

Los delítos de Zelaya no tienen ningún tinte político, como lo ha pretendido hacer creer el actual presidente, Porfirio Lobo Sosa

Es realmente extraño que suceda esto, ya que el actual presidente Porfirio Lobo Sosa ha intervenido e interferido en el poder judicial hondureño, con el objetivo de promulgar la impunidad en los juicios que se le siguen a Zelaya por actos de corrupción, terrorismo y traición, los cuales para el presidente Lobo, son delitos políticos.

Los delitos de Zelaya no tienen ningún tinte político, los mismos son hasta lesivos a la integridad del individuo, a la paz mental, atentan contra la moral, pero sobre todo hunden más a esté país, que siendo el segundo más miserable del mundo, defiende a quien lo ha llevado aún más a la ruina.

Todo lo que se vive en Honduras parece será, un compadrazgo hablado, esto no es nada salido del azar, es una secuencia de sucesos que buscan un fin común para los actuales y pasados presidentes, la asamblea nacional constituyente y promover a todas luces la impunidad.