Una de las opciones que puede tener el comerciante, en estos momentos de altas ventas en el año, es contratar personal temporario; con los puntos desfavorables que eso implica. No es fácil encontrar una persona que tenga experiencia y pueda trabajar por poco tiempo; además el tiempo que se debe dedicarle para que se adapte al negocio y capacitarla representa una inversión. Muchas veces, en la urgencia de responder a las demandas de los clientes se contrata cualquier persona y la determinación no es la mejor por lo cual se encuentran con mayores problemas. Hay muchas personas que no tienen un verdadero compromiso con el trabajo, y hay que tener mucho cuidado antes de contratarlas. Solicitar referencias laborales en puestos anteriores puede dar tranquilidad cuando se resuelve la selección.

Otra de las alternativas en temporadas de grandes ventas es quedarse en horarios extras para organizar la mercadería, marcar precios, hacer el control de inventario, contar cuántos artículos existen, entre otras tareas. Si se cuenta con un programa de facturación muchas de estas tareas pueden resolverse apretando un solo botón. Otra de las grandes ventajas que se puede tener con la adquisición de un software de gestion es ofrecer respuestas rápidas y concretas a cada uno de sus clientes que ingresan sin hacerlos esperar. Esto genera un valor agregado en la calidad de atención a los clientes que debe aprovecharse para optimizar el trabajo cotidiano. Cuando se requiere reponer mercadería, el mismo sistema a medida le permitirá obtener un detalle de cada producto.